21 de septiembre de 2009

Amar

Se convierte en una necesidad,
en una sed que no se apaga
después de que pasó una vez.
No hay forma de desactivar esa función

¿Y si no hay quien quiera que lo quieran?



Le hablas a las plantitas,
Al gato de la vecina
o te casas.

2 comentarios:

Korscha dijo...

ó uno termina casado... Sin más...




... : (

K dijo...

Alguien que me explique lo del casamiento...