
El pez ataca culichitown a las 14 horas; justo cuando saco los sellitos del licenciado reyes para ponerselo al monton de escrituras inútiles que hay en mi escritorio. No, no trabajo, es solo mi servicio social. Pero aún así el pez volador mecánico perturba mis labores revoloteando de lado a lado frente a mis narices, como un péndulo. 14:01, me mira vorazmente, se quiere comer mi nariz. 14:01:30 el pez volador mecánico pirañesco me mira a los ojos como si fuera un adversario 14:01:45 se posa sobre el cojincillo de tinta morada y hace un reguero sobre mi agenda. 14:02:05, saco la botella del muso y meto al pez mounstruoso mecánico pirañesco. 14:02:07, se convierte en meducita brillante y el muso la usa de lámpara... moraleja del ataque del pez mounstruoso mecánico pirañesco asesino: un muso no tiene precio.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario